Cómo cuidar y proteger tu piel del sol

Protección solar: la importancia de cuidar la piel y el cabello del sol. Protégete de los rayos UV.

La  luz del sol puede resultar beneficiosa para el organismo, nos aporta vitaminas y energía. Sin embargo, es fundamental usar protección solar, para evitar ser vulnerables a los rayos UV y que la exposición al sol no dañe nuestra piel.

La piel es el órgano más grande del ser humano. Nos protege de los elementos externos que nos pueden dañar, regula la temperatura corporal, la pérdida de agua y nos aporta el sentido del tacto. Por eso, es tan importante cuidarla y evitar dañarla, evitando así alteraciones y reacciones.

Además de hidratación y correcta limpieza, es fundamental la protección frente a la exposición del sol, y no estoy hablando solamente del verano, sino durante todo el año

Si bien el verano es la estación en la que la radiación es más intensa, nuestra piel – y en especial la de nuestro rostro – está igualmente expuesta en primavera, otoño e invierno. Aunque el día parezca nublado, los rayos ultravioleta nos afectan de igual forma

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La protección de nuestra atmósfera se debilita, año tras año, haciendo que la radiación se haga cada vez más fuerte. Por eso, debemos proteger nuestra piel usando protectores y bloqueadores solares durante todo el año y a diario, en nuestro rostro y cuerpo, en todas las ocasiones en las que lo exponemos al sol.

El protector solar se aplica, como prácticamente todos los cosméticos, sobre la capa más externa de la piel. 

La epidermis está compuesta esencialmente por queratinocitos. El tipo de célula principal de la epidermis encargada de  producir la proteína llamada queratina que ayuda a la piel a proteger el resto del cuerpo. Esta proteína hace la función de barrera protectora frente a agentes externos y de evitar que perdamos líquidos.

Los tipos de piel - Fototipos

Seguramente, hayas oído hablar de los tipos de piel y, en consecuencia, de la protección necesaria en base a esos tipos que se clasifican en función a la sensibilidad al sol.

Las pieles más pálidas (fototipos I y II) presentan más riesgo y son más fotosensibles mientras que en las más oscuras (fototipos V y VI) este riesgo es menor, ¡ojo! Esto no quiere decir que no deban protegerse.

Radiación solar: beneficios y perjuicios

El sol emite varios tipos de radiación: rayos gamma, X, ultravioleta, espectro visible e infrarrojos. 

Prácticamente, todos los tipos de radiación solar quedan atrapados por las capas de la atmósfera por lo que, a la superficie terrestre, sólo llegan parte de los ultravioleta, de los infrarrojos y el espectro visible.

Rayos ultravioleta

Los rayos ultravioleta son invisibles al ojo humano. Presentan longitud de onda corta por lo que tienen gran poder de penetración.

Hay tres tipos de rayos UV:

UV A

Llegan durante todo el año, afectando a las capas de la dermis. Son los causantes del bronceado pero también del fotoenvejecimiento (arrugas, pigmentación irregular, grandes manchas, tez amarillenta así como textura áspera y coriácea) y, en casos más graves, cáncer de piel (melanomas y no melanomas).

UV B

Tienen mayor dificultad para traspasar la atmósfera pero, a pesar de ello, son bastante peligrosos. Causan, igualmente, fotoenvejecimiento y cáncer

UV C

No consiguen atravesar las capas atmosféricas ya que son absorbidos por la capa de ozono. Debido a su nocividad, es especialmente  importante mantener la capa de ozono con el espesor adecuado.  Para ello, no deberíamos usar productos que contengan CFCs, HCFCs, Halones, Tetracloruro de carbono, Hidrobromofluorocarbonos o Bromuro de metilo.

El Protocolo de Montreal controla en la actualidad noventa y seis (96) productos químicos. Su uso está regulado en la Unión Europea por el Reglamento (CE) nº 1005/2009 de 16 de septiembre de 2009 sobre las sustancias que agotan la capa de ozono.

UV A

Llegan durante todo el año, afectando a las capas de la dermis. Son los causantes del bronceado pero también del fotoenvejecimiento (arrugas, pigmentación irregular, grandes manchas, tez amarillenta así como textura áspera y coriácea) y, en casos más graves, cáncer de piel (melanomas y no melanomas).

UV B

Tienen mayor dificultad para traspasar la atmósfera pero, a pesar de ello, son bastante peligrosos. Causan, igualmente, fotoenvejecimiento y cáncer

UV C

No consiguen atravesar las capas atmosféricas ya que son absorbidos por la capa de ozono. Debido a su nocividad, es especialmente  importante mantener la capa de ozono con el espesor adecuado.  Para ello, no deberíamos usar productos que contengan CFCs, HCFCs, Halones, Tetracloruro de carbono, Hidrobromofluorocarbonos o Bromuro de metilo.

El Protocolo de Montreal controla en la actualidad noventa y seis (96) productos químicos. Su uso está regulado en la Unión Europea por el Reglamento (CE) nº 1005/2009 de 16 de septiembre de 2009 sobre las sustancias que agotan la capa de ozono.

Los rayos ultravioleta, a dosis moderadas, son importantes para nuestra salud.

Estimulan los melanocitos, las células de la dermis productoras de melanina (la sustancia natural que nos da el color a la piel, cabello e iris del ojo) con el consiguiente beneficio. 

Otro efecto beneficioso es que favorecen la síntesis de vitamina D, indispensable para la absorción del calcio. Además, favorecen la síntesis de células ricas en queratina que hace aumentar el grosor de la capa córnea, lo que hace que la piel sea nuestra primera barrera de defensa contra lesiones externas, microbios, etc.

Espectro visible

Este tipo de radiación solar es la utilizada por las plantas para realizar la fotosíntesis, base de la alimentación de todos los vegetales. 

Permite la visión, estimulando las células de la retina, el ojo humano la percibe como colores.

Infrarrojos

Los infrarrojos poseen poca longitud de onda por lo que tienen menos poder de penetración. Emiten calor y son importantes para mantener el efecto invernadero natural.

Son los causantes de los golpes de calor, insolaciones e incluso del fotoenvejecimiento.

Tipos de protección solar.

Hay un gran cantidad de productos para reducir los efectos de los UVLa ropa, las telas que se usan para hacer carpas y toldos o las gafas de sol tienen protección solar.

Recuerda lo importante que es tener en cuenta esta protección a la hora de elegir unas bonitas gafas de sol, clave para evitar quemaduras que puedan dañar tus ojos.

Protección de la piel contra las radiaciones solares. Filtros solares.

Hay un gran cantidad de productos para reducir los efectos de los UVLa ropa, las telas que se usan para hacer carpas y toldos o las gafas de sol tienen protección solar.

Recuerda lo importante que es tener en cuenta esta protección a la hora de elegir unas bonitas gafas de sol, clave para evitar quemaduras que puedan dañar tus ojos.

Bloqueadores y protectores.

Los bloqueadores y protectores solares nos ayudan a cuidar la piel, reduciendo los factores de riesgo de los rayos UV

Tipos de filtros solares.

Los bloqueadores están compuestos por elementos físicos mientras que los protectores están compuestos por químicos.

Físicos

Los bloqueadores físicos reflejan la radiación solar. Son conocidos como “pantalla”, son muy espesos y suelen ser blancos. Su efecto se debe a que poseen óxido de zinc y/o óxido de titanio. Están, especialmente, recomendados para niños, personas alérgicas, para proteger cicatrices, etc.

Ten en cuenta la composición de la crema, a la hora de escogerla pues, si lleva óxido de zinc o titanio, puede resultar contaminante para el agua y la vida marina. Se calcula que, al menos el 25% de las cremas corporales van a parar a los océanos cuando, tras aplicarnos la crema solar nos bañamos en el mar. 

Químicos

Los bloqueadores químicos absorben la radiación ultravioleta, captan la energía y la transforman en calor.

Hay filtros químicos de UV A, B y de amplio espectro. Son más fluidos que los bloqueadores físicos y es preciso aplicarlos 30 minutos antes de la exposición solar. Posteriormente, debes repetir la aplicación cada 2 horas.

Biológicos

Actúan junto con los anteriores por lo que no se deben usar solos. Se trata de agentes antioxidantes que reparan los procesos oxidativos de las células. Son las vitaminas A,C y E.

Físicos

Los bloqueadores físicos reflejan la radiación solar. Son conocidos como “pantalla”, son muy espesos y suelen ser blancos. Su efecto se debe a que poseen óxido de zinc y/o óxido de titanio. Están, especialmente, recomendados para niños, personas alérgicas, para proteger cicatrices, etc.

Ten en cuenta la composición de la crema, a la hora de escogerla pues, si lleva óxido de zinc o titanio, puede resultar contaminante para el agua y la vida marina. Se calcula que, al menos el 25% de las cremas corporales van a parar a los océanos cuando, tras aplicarnos la crema solar nos bañamos en el mar. 

Químicos

Los bloqueadores químicos absorben la radiación ultravioleta, captan la energía y la transforman en calor.

Hay filtros químicos de UV A, B y de amplio espectro. Son más fluidos que los bloqueadores físicos y es preciso aplicarlos 30 minutos antes de la exposición solar. Posteriormente, debes repetir la aplicación cada 2 horas.

Biológicos

Actúan junto con los anteriores por lo que no se deben usar solos. Se trata de agentes antioxidantes que reparan los procesos oxidativos de las células. Son las vitaminas A,C y E.

Existen en el mercado multitud de protectores solares de diferentes tipos, para cada caso y situación. Podemos encontrarlos en forma de cremas, geles, espráis… 

Las cremas, por ejemplo, se suelen usar sobre la piel seca, mientras que los geles van bien en las áreas de la piel donde hay pelo. Los espráis, por su parte, son los menos recomendables, ya que a veces resulta difícil saber si se han quedado flotando en el aire o se han aplicado correctamente, incluso pudiendo haberlos respirado.

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El factor de protección solar (FPS)

Como ya te conté, los protectores solares faciales y corporales se clasifican en función del tipo de radiación UV del que protegen pero, también, por su FPS (factor de protección solar).

La recomendación general es usar un protector solar facial o corporal con, al menos, un FPS de entre 15 o 30.

Se considera que un FPS de 15 nos protege contra, aproximadamente, el 93% de la radiación UVB y un FPS de 30 del 96%.

¿Cómo aplicar el protector solar correctamente?

Debes aplicar el protector solar 30 minutos antes de la exposición al sol para asegurarte de que la piel lo absorba correctamente.  Después de bañarte o de sudar, aunque el producto sea “resistente” al agua, debes volver a aplicarlo sobre la piel.

Sobre el bloqueador, este es efectivo si se aplica uniformemente sobre la piel. Debido a su composición, este puede ser aplicado con eficacia inmediatamente antes de la exposición al sol.

La importancia del protector solar facial.

Nuestro rostro es la parte más visible y expuesta al sol de nuestro cuerpo. Por tanto, es la más expuesta a agentes externos y a los rayos UV de forma directa. Debido a esto, tenemos que poner especial atención a su cuidado. 

Mi recomendación es usar protector solar facial todos los días del año.

Proteger el cabello del sol

Además de nuestra piel, debemos tener en cuenta que la exposición excesiva a los rayos UV pueden dañar la estructura de nuestro cabello, así como nuestro cuero cabelludo. 

Como ya te conté, los rayos UV son altamente reactivos por lo que inducen la oxidación de las proteínas y aminoácidos que forman parte de la estructura de nuestro cabello.

Los rayos UVA penetran a menor profundidad que los UVB, provocando más daños en la parte externa (formado por las cutículas) que en la parte interna (cortex) del cabello. Esto provoca que el cabello sea más poroso y frágil, debido a la rotura de las cutículas.

 

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Los UVB pueden llegar a penetrar en la fibra capilar alcanzando el córtex y dañando de esta forma la melanina y la queratina

El efecto visible de la degradación de la melanina (pigmento que da al cabello su color y protege las proteínas del cabello) es el aclaramiento del cabello. El daño a la queratina se manifiesta haciendo que el pelo pierda su estructura original y se muestre encrespado y quebradizo.

Con respecto al cuero cabelludo, debemos tener presente que este también corre el riesgo de sufrir manchas y quemaduras solares. Por eso, es fundamental cuidarlo y protegerlo, al igual que el cabello y la piel. 

Tal y como te conté en mi artículo sobre el cuidado de las pieles sensibles,  un producto que resulta idóneo para mantener la hidratación tanto de tu cabello es el acondicionador sólido

El acondicionador sólido aportará a tu pelo un extra de nutrición, a través de su formulación con ingredientes naturales:

Luce un cabello espectacular mientras te cuidas y proteges de los rayos solares.

Algunas recomendaciones:

Algunas recomendaciones:

  • Utiliza protección durante todo el año.

  • Usa abundante protector solar y con frecuencia aproximada de cada dos horas.

  • No apliques el protector solar cerca de los ojos.

  • Si te bañas con frecuencia en la playa, río o piscina, asegúrate de volver a aplicarte protector solar al salir del agua.

  • Ten en cuenta que la vida útil de un protector solar no es mayor de un año.

  • Todas las personas, pero especialmente l@s niñ@s, necesitan protegerse de los UV.

    Ten en cuenta que los bebés menores de 6 meses no se deben exponer al sol. Por eso, cuando salgan al exterior, deben usar una ropa ligera que les cubra brazos y piernas. Además, deben llevar gorra con visera. Es recomendable también usar una pequeña cantidad de protector solar en sus manos y cara.

  • Utiliza protección durante todo el año.

  • Usa abundante protector solar y con frecuencia aproximada de cada dos horas.

  • No apliques el protector solar cerca de los ojos.

  • Si te bañas con frecuencia en la playa, río o piscina, asegúrate de volver a aplicarte protector solar al salir del agua.

  • Ten en cuenta que la vida útil de un protector solar no es mayor de un año.

  • Todas las personas, pero especialmente l@s niñ@s, necesitan protegerse de los UV.

    Ten en cuenta que los bebés menores de 6 meses no se deben exponer al sol. Por eso, cuando salgan al exterior, deben usar una ropa ligera que les cubra brazos y piernas. Además, deben llevar gorra con visera. Es recomendable también usar una pequeña cantidad de protector solar en sus manos y cara.

Recuerda que:

" proteger tu piel y tu cabello de manera efectiva, asegurará que pases un verano sin riesgo y que tu piel permanezca jóven y sana por más tiempo"
Sobre mi monica
Mónica
Atelier 309
" proteger tu piel y tu cabello de manera efectiva, asegurará que pases un verano sin riesgo y que tu piel permanezca jóven y sana por más tiempo"
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